La tecnología como aliada para la educación de los niños

La educación es un tema que, desde varias aristas, presenta retos para los alumnos, sus padres, los educadores y las instituciones. Y si ya había comenzado una importante incorporación de la tecnología a los sistemas educativos, con la pandemia estos sistemas de acompañamiento se volvieron una extensión del aula presencial.

Para algunos, los dispositivos tecnológicos como tabletas o celulares no tendrían que estar al alcance de niños pequeños porque se asume que aún no tienen la preparación suficiente para evitar peligros asociados al uso de internet y redes sociales, pero es un hecho que esta tecnología ya forma parte de nuestras vidas. Evitarles el contacto con este tipo de herramientas los marginaría de su entorno.

La solución está en quienes son los principales guías de los niños: sus padres y profesores, quienes pueden acercarse a las ventajas de la tecnología de manera responsable, entendiendo y apoyando el aprendizaje de sus hijos gracias a la flexibilidad y acceso que éstas otorgan.

Prioridades para la educación de los niños 

En la Convención sobre los Derechos del Niño del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, 2020, donde se evaluaron desafíos y prioridades para la educación de los niños, se plantearon cuatro principios básicos (4A: Availability, Accesibility, Acceptability y Adaptability) que debía seguir la educación durante la pandemia, pero que pueden mantenerse vigentes en el contexto actual:

·  Disponibilidad: es decir, existencia de sistemas que permitan el aprendizaje presencial y a distancia (online).

·  Accesibilidad: hacer un seguimiento de la educación en el país.

·  Aceptabilidad: que la calidad del aprendizaje presencial, a distancia o híbrido, así como los materiales educativos sean culturalmente apropiados para los pequeños.

·  Adaptabilidad: que la educación se adapte a las necesidades cambiantes de la sociedad (en pandemia) y sea compatible con todos los niveles culturales.

Con la pandemia, la tecnología se convirtió en una de las principales aliadas de la educación, pues se adapta a las necesidades y tiempos que cada alumno requiere,  en cualquier modalidad de aprendizaje.

Uso de tecnologías

De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2021, en México hay un total de 91.7 millones de usuarios de telefonía celular. La cifra equivale a 78.3 % de la población del estudio. 

Datos de Statista, el portal de estadísticas y estudios de mercado, indican que el número de usuarios de teléfonos móviles en otros países de Latam es el siguiente: Colombia (35.08 millones), Chile (16.9 millones), Ecuador (11.5 millones) y Brasil (167.5 millones). 

En muchos casos, los pequeños llegaban a tomar clase en los teléfonos celulares y éste uno de los dispositivos que más utilizan las generaciones jóvenes. Niños en edades entre los 6 y los 12 años (que cursan la educación primaria) son capaces de crear videos bien editados y musicalizados, o de hacer animaciones que antes eran cosa de profesionales. Y muchas de esas creaciones las hacen de manera intuitiva; entonces, imaginemos lo que podrían lograr con una buena dirección de estas habilidades. 

Tecnología en la educación 

La era de la Edtech o tecnología de la educación, abre grandes oportunidades para transformar la forma en que todos nos acercamos al conocimiento, pero desde las necesidades de cada individuo. Y no sólo eso, sino que acerca la educación a aquellos que no pueden estar presencialmente en un aula. Podría decirse que democratiza el acceso al aprendizaje.

Si bien los pequeños aún no tienen la formación crítica suficiente para elegir lo mejor para ellos en el universo de posibilidades y opciones que les ofrece el mundo digital, los padres y educadores si tienen la capacidad para informarse y estar mejor preparados para guiar a sus hijos y alumnos y lograr que potencien sus capacidades a través de los recursos que les ofrece la tecnología.

No olvidemos que precisamente entre los 6 y 12 años es el momento clave para el desarrollo intelectual y cognitivo de las personas, además de ser un tiempo muy creativo y en el que se aprenden conceptos complejos y abstractos. En suma, hablamos de una etapa altamente receptiva para la adquisición de conocimientos y construcción de bases para el futuro.

Hoy, la transformación digital de la educación -en cualquier nivel- está asociada a los sistemas de gestión de aprendizaje (LMS, por sus siglas en inglés) que son un verdadero ecosistema donde la participación y avances del alumno pueden ser supervisados por padres y docentes.

La educación y la tecnología hoy son una dupla natural para los niños, así que aprovechemos la natural curiosidad de los pequeños para que adquieran herramientas que les permitirán potenciar sus capacidades y habilidades particulares e insertarse exitosamente en una sociedad cada vez más digitalizada.